El impuesto de turismo sostenible hará realidad el centro de interpretación del Parque Natural des Trenc-Salobrar de Campos. El nuevo modelo de aparcamientos de la zona reduce a la mitad los que hay hace 5 años. La vicepresidenta del Govern y consellera de Innovación, Investigación y Turismo, Bel Busquets; el conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal; y el alcalde de Canpos, Sebastià Sagreras, han presentado, este jueves, el proyecto de adecuación del edificio llamado Ca n'Estela como centro de interpretación del Parque Natural Maritimoterrestre des Trenc-Salobrar de Campos. El proyecto, financiado por el fondo del impuesto de turismo sostenible, tiene un presupuesto de 1.033.000 €.

El ayuntamiento de Campos, propietario de los terrenos, propuso ubicar el Centro de interpretación en Can Estela, erigido como sede de la escuela municipal en tiempos de la II República, y que se encontraba en desuso desde hacía años. Cuando entre en funcionamiento, la infraestructura estará capacitada para recibir a los visitantes del Parque Natural y poder darles información detallada sobre sus catacterísticas y peculiaridades. De esta manera, las instalaciones recuperan su función educativa y divulgativa.

El edificio del aulario se dedicará propiamente a centro de interpretación y recibimiento de visitantes con una sala de exposiciones y otra para emisión de audiovisuales. El edificio de la antigua vivienda de los maestros se destinará a vivienda de investigadores con capacidad para seis plazas, con una sala de trabajo en la torre. Por otra parte, hay un porche adyacente que se convertirá en laboratorio de los investigadores. En el ámbito constructivo, el criterio a seguir será la eliminación de elementos añadidos y restauración de elementos constructivos significativos con técnicas y materiales tradicionales.

Vidal también ha adelantado que este verano ya se encontrará en funcionamiento el nuevo aparcamiento disuasorio de sa Barralina, que sustituirá el que funcionaba irregularmente en ses Covetes y que fue clausurado por orden judicial. El nuevo aparcamiento dispone de 497 plazas de coches, menos de la mitad de los que llegaban a aparcar en el anterior, y comportará la eliminación del aparcamiento inadecuado en el camino municipal de acceso. La semana pasada empezaron las obras de acondicionamiento de los terrenos, que prevén el intercambio modal en el transporte público colectivo, y un diseño de alta exigencia ambiental (siembra de especies de árboles y arbustos existentes en la zona, autosuficiencia energética) y paisajísticos.

El conseller ha anunciado que será el Ayuntamiento de Campos quien gestione el aparcamiento a través de un convenio con la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, que tendrá una vigencia de cuatro años. El consistorio se compromete a revertir los beneficios generados en la gestión y la conservación del Parque Natural, además de encargarse de la limpieza de la zona y de toda la playa, dentro del término municipal. Además, impulsará iniciativas y proyectos en la zona protegida. El consistorio también acondicionará un espacio para peatones en el camino y eliminará las plazas de ORA de ses Covetes.

Por otra parte, del aparcamiento conocido de ses Arenes, también se reducirá la capacidad de 800 a 400 plazas, según lo que marca la normativa del Parque, que también establece que el aparcamiento tendrá que quedar fuera del dominio público maritimoterrestre, una zona que la propiedad tendrá que restaurar al estado natural. Además, la propiedad tendrá que financiar medidas de intervención en favor del Parque, previstas en el Plan de Gestión, por un importe de unos 200.000 euros cada cinco años.

Estas inversiones tendrán que ir dirigidas a la mejora ambiental del Parque Natural y, principalmente, a la restauración de la zona dunar, con medidas de protección ante el cambio climático, y en el desarrollo de iniciativas incluidas dentro del Plan de la Red Natura 2000 y las que determinen los futuros planeamientos del Parque Natural.